El Rito en la racionalidad transferencial
El hombre occidental tiende a pensar que la magia es una sugestión, un producto de
una mente subyugada y es que parte de una racionalidad de causa y efecto y
encima tiende a pensar que es la única racionalidad posible, sin comprender que
la racionalidad es vinculación, relación, y que esta se da transferencialmente
desde el Espíritu.
Pero para comprender esto se tendría que pensar en una
verdad absoluta y comprender que esta verdad está fuera de toda existencia y posibilita toda existencia,
es decir que esta verdad se está transfiriendo y entonces lo real queda fuera del espacio
tiempo y la realidad es el espacio tiempo es decir todas las entidades que
devienen, porque el ser deviene pero su verdadera naturaleza está en la nada, donde el ser y el no ser son lo
mismo, en el devenir se produce el despliegue de este ser y no ser, el devenir
es una espiral que volverá al principio a lo absoluto.
Pero como es que surge de la nada el devenir del ser, por
medio del rito, por medio del acto simbólico que invoca la transferencia, el
rito va a la nada misma y resurge de ella, invocando y es el rito el que
construye la realidad, entonces si yo he hecho un rito, lo invocado en el rito
encontrara su camino produciendo diacronías y sincronías, pero el rito parte de
una acronía, entra en la nada informe, en el campo ontológico e
invoca y así surge la realidad con todos
sus sistemas.
Dios transfiere su espíritu el cual es absoluto (la nada
donde surge el ser) revelado (la racionalidad por la cual deviene el ser en
contante transferencia espiritual)Subjetivo (alguien va tomando conciencia de
este proceso y lo recrea libremente )objetivo (se van logrando los sistemas).
Al transferirse el espíritu se invierte y se convierte a si
mismo sufriendo la gravedad del devenir y superando esta gravedad con la
levedad del ser en la conversión, lo
cual produce todos los procesos, el rito recrea simbólicamente todos los procesos
y permite que esto suceda, el rito vuelve al evento de la verdad absoluta, esa
verdad es el amor divino donándose, transfiriéndose.
El mito es un conjunto de ritos, que construyen el campo
transferencial, campo donde los espíritus luchan, solo un rito puede romper
otro rito, si no hay un rito que rompa otro rito el espíritu seguirá transfiriéndose,
he aquí la meta estructura base de toda estructura.
El rito es la fe en acción recreando simbólicamente la
transferencia del espíritu, una vez hecho el rito el espíritu invocado en
el encontrara su camino y terminara realizando su
proceso.
¿Cuál es el problema?
Que el único espíritu que vuelve a la conversión divina es
el Espíritu Santo, lo demás vuelven a su propia conversión que es una inversión
quedando atrapados en la gravedad del devenir.
Pero ¿Cómo es posible esto? ¿Acaso no hay solo un espíritu el espíritu divino?
Claramente todos los espíritu devienen del espíritu divino,
pero las almas se resisten al espíritu divino y rompen el biotejido pecando, no
se da en ellas un transferencia y una re transferencia sino que se
retransfieren a si mismos quedado convertidos en falsos dioses, y aunque pueden
entrar en la nada mimas donde todo regla física queda abolida, tarde o temprano está nada será su infierno, será la potencialidad
de todas sus desgracias.
Por esto el rito más importante es el del bautizo para morir
a todo espíritu inmundo que haya quedado invertido y volver al Espíritu Santo donde
hay conversión, donde nos redimimos volviendo al Padre en el Hijo.
Es aquí donde entramos al campo ontológico muriendo a nosotros
mismo y resucitando espiritualmente en
Dios, he aquí el milagro más grande donde se altera el espacio tiempo con todo
su destino marcado y se abre un nuevo horizonte.
Cuarta carta de la
verdad como un evento de amor
¿Quién es Mierdad?
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