Buscar este blog

jueves, 27 de febrero de 2025

Aprendiendo a respirar en el logos

 

Aprendiendo a respirar    en el logos 

Echó, pues, fuera al hombre, y puso al oriente del huerto de Edén querubines, y una espada encendida que se revolvía por todos lados, para guardar el camino del árbol de la vida.

 

PADRE, TU REINO NO ES DE ESTE MUNDO

Quédate, pues, con tus peces,

con tus panes multiplicados de la nada

que sólo sirven al sumiso y al inútil.

Que yo tengo aquí por mío

el reino de lo palpable,

el reino de lo sombrío.

Más me importa que los árboles florezcan,

que sople el viento e hinche mis velas...

Más me importa que los frutos crezcan.

Y más me importa que la luna salga

marcando el principio y el final

de la siembra y de las temporadas.

No, yo no necesito de tus milagros,

de ninguno.

Sólo, y nada más, de mi libertad.

El milagro es mío,

cuando el alimento y el vino

los multiplico al trabajar.

 

Osvaldo Salazar

Del muro de Joel Agón  

¿Dónde está  tu alma?

¿Crees que habita en las entrañas de tu cuerpo?

¿Es que no te he enseñado el campo ontológico?

 ¿No has visto  las miles de hebras del biotejido?

Ahí está  tu alma transfiriéndose en toda el tejido espiritual

El problema es que no has aprendido a respirar

0 filosofía oriental ←inhala retransferencia absorbe a todo

Y a todos, vacía tu mente de todo prejuicio

Que tu conciencia se abra como una concha     

Yo voy a hinchar tus velas

Ahora deja que acontezca adentro haiku

Voy a  incubarme en tu preconsciente

¿Qué soy?

1→←1

El múltiple reflejo de tu alma

Extingue esos reflejos el arte oriental

Se basa es diluir los sueños no en producirlos

  Es un arte que va a lo esotérico 4 margas

Jnana marga medita

Karma marga Wu wei

Bhakti marga adora

Kundalini marga lleva a la serpiente a su raíz

¿Qué hay? 

Luz 10←

 

Aprendiste a inspirar

 

Ahora exhala esa luz ten fe 1→

Sal del inconsciente hay una barrera 1→/

Necesitas del arte occidental para producir sueños

0 0 esta es tu mediación   

Llena ese vacío que separa tu alma del alma de Dios

Tu vez el complejo de Edipo  

 0 1→←1 0

Crees que tu padre te separa de tu madre

Pero el quijote está  en sancho

Y sancho en el quijote

      0←→1

En tu padre encontraras a tu madre ten fe razona  

0   tu nada se ha integrado ahora puede mediar

Alcanza el concepto supera la dialéctica amo y esclavo

  Reconoce tu libertad en la comunidad organizada  en biotejido

Amagi has vuelto a casa, he aquí la libertad positiva mi reino 10

Vez que tu luz interior coincide  con el concepto de libertad

01←→10 Esto es ciencia

Lo  de adentro es lo mismo al mismo tiempo diferente que lo de afuera

Y lo de afuera por fin conoce lo de adentro has saboreado tu espíritu.

 

Pero las cosas no son así, todo empieza con una alteración de sistemas

El otro te construye

 

   0←1←0 y tu inspiras 1←0←1 Ella expira  

Luego tú expiras  1→0→1  y ella  inspira 0→1→0  

Es un campo ontológico

No un sistema

En un sistema hay contratransferencias-conflictos

El sistema siempre se forma en una suma cero compitiendo contra el otro

  En un sistema hay héroes y villanos  

En un campo ontológico solo hay ser que se transfiere 1→0→1

 Y no ser que se retransfiere  0←1←0 

  

Tu alma está  en el otro

Y su alma está  contigo

En un sistema las almas luchan por dominar a la otra

Hasta la asfixia

 

Por esto aprende a respirar mira el proceso más amplio

 

 

1→0→1 exhalas →0→1→0 ella inhala Espíritu absoluto  religión sagrada

 Resein anti espíritu absoluto Religión profana Tu inhalas 0←1←0←Ella exhala ←1←0←1

  01←→10  Se da el ciclo completo se crea el símbolo y el a símbolo en el interior

 

¿Qué hay que hacer para lograr esto? 

 

El misterio pascual debe de sanar la herida en el inconsciente

1→0 0→1  integrando  a tu nada a la nada divina integrando tu muerte

Con la muerte de Cristo y su resurrección

1→0→10

 

El misterio dharmico debe de superar la contradicción de tu deseo con el dharma

0←1→←1←0

 

Una vez tu deseo sea la voluntad del cosmos, el camino, te iluminaras adentro

10←1←0

 Ahora unes en el misterio trino tu expiración con tu inspiración y estas vivo espiritualmente

 

01←1←0←→1→0→10

 

Tu inconsciente se ha sanado tienes la fe para transferir tu ser y retransferir el no ser  

Has superado la biodramturgia y su conflicto ontológico-ecológico logrando una comunión mística.   

   Vayamos a tu preconsciente

Comprendiendo que en la religión también hay preconsciente y consciente como la relación sociocultural de las conciencias que integradas generan una súper consciencia, pero lo que prima es el inconsciente, como en el arte prima el preconsciente     

 

1→0→1→0→1→0→tu exhalas→0→1→0→1→0→1 Ella inhala

Espíritu revelado arte occidental produces la imagen como en un sueño 

0←1←0←1←0←1←ahora tu inhalas←0←1←0←1←0←1 y ella exhala

Arte oriental se practican los margas hasta extinguir tu voluntad e integrarla al dharma

El problema es que en el preconsciente encontraras el conflicto de Edipo y entraras en contra transferencia con la ley con el padre  o serás más papista que el papa y harás un complejo de Electra  juzgando a tu madre desde la ley del padre que tu exiges que ella cumpla

1→0→1→0→1→0→←1←0←1←0←1←0

Pero otra vez si aprendes a respirar a hacer la imagen paradójica poética Él está en ella y ella en el Tao, blanca nieves debe de dejar de odiar a su madrastra, cenicienta  mato a su padre y pronto con su razón desterrara a su madre la naturaleza y a sus hermanas la flora y la fauna pero si el arte le devolviera su imagen para que seguir envidiando el falo, que el príncipe se vaya con su zapato de cristal a otra parte, en la verdadera humildad yo me reconcilio con mi madre y mis hermana, porque en ellas reconozco a Dios.

01←0←1←1←0←1←→0→1→10→0→1→10

Oh que engañoso puede ser el preconsciente desplazando y condensando

https://www.youtube.com/watch?v=_5dze89n8uU

Variando la elaboración simbólica para enmascarar nuestros deseos más profundos

Por esto a veces el arte abyecto es el mejor

Veo ahí al guerrero convertirse en un evangelizador

Si lograste la sintranferencia del arte del biotejido has superado el conflicto ético-psicológico

Y conoce al logos, que perdona y deja de perdonar que ata y desata, uniendo y desuniendo los tejidos del espíritu y la voluntad.

 

Pero hay que ir a la conciencia y solo el concepto la integra  

1→0→1→0→1→0→1→0→10→01→1→0→1→0→1→0→1→0

El sujeto exhala conceptos el dasein devora mundos filosofía esencial 

1←0←1←0←1←0←1←0←10←01←1←0←1←0←1←0←1←0  

 

El dasein retransfiere mundos existencias auténticas diferentes

Filosofía existencial

 

Si logras la sintransferencia logras superar el conflicto gnoseológico.-político

  01←0←1←0←1←0←1←0←10←01←1←0←1←0←1←0←1←0 ←→ 1→0→1→0→1→0→1→0→10→01→1→0→1→0→1→0→1→01

Pero como comprenderás esto no es tan fácil porque el sujeto determina al dasein en su concepto  determinándolo en sistemas, mientras que el dasein se niega a ser determinado

Aquí  hay un proceso de deconstrucción del sujeto

 

1→0 0→1/2→0→1→←1→1/6→1→0 0→1/4→1/4→1→0 0→1→0 0→1/2→0→1→←1→1/6 

 

Lo que debería llevar a un proceso de redeconstruccipon del dasein para volver a la unidad perdida radicalizando el proceso de deconstrucción pero más bien da pie al proceso algorítmico donde las personas dejan de transferir y los códigos se vuelven recursivos como si fueramos puertas lógicas reaccionado programadamente  al estímulo.

 

1 0 0 1 0 1 0 0 1 0 0 1 1 0 0 1 0 1 0 1 10 1 0 1 1 0 1 0 1 0 1 0  1 0 1 0 0 0 0 1 0 0 0 1 0 1 0 1 0

 

Ya nadie respira espiritualmente y cuando lo hacen solo tiene la herida para transferir y retransferir gozando con el mal  y comprando desde este infierno dices que yo no soy el milagro sino que lo eres tú pero el dasein trabaja y transforma el mundo porque aun respira agonizando pero respira, más cuando lo deje de hacer que será muy pronto, ya no me veras más en la calidad de sus productos humanos, saborea mientras el pan, que se hace desde dentro, si aún lo puedes encontrar.

 

Pero recuerda que yo te enseñe a respirar, del paso del preconsciente al inconsciente esta la espada    de los querubines resguardando el árbol de la vida pero yo te enseñe a respirar y morir bajo esa espada plasmática y a resucitar para que transfieras vida a los hombres y vida en abundancia es esta vida la que multiplica los panes y no tú, que más bien los privatizas y los comes solo, para superar el conflicto integral y realmente alterar sistemas transfiere tu ser dónate a los otros y deja que los otros se donen a ti   ¿Esto es el comunismo complementario? No en el comunismo aún hay un ismo una voluntad que quiere imponerse, y que se arroga ser alguien cuando realmente es nada yo te hablo del reino, pero ¿Aprendiste a abrir tu corazón  para recibirme?  ¿Y aprendiste a darlo para donarme?  ¿Aprendiste a respirar? ¿O te sigues ahogando en tu desesperación?  Vamos de una vez por todas cágate en mi yo no soy Dios, así abrirás tu campo ontológico al verdadero Dios y cágate en él, él tampoco es Dios pero no dudes que hay un Dios en el que jamás te podrás cagar, porque sin su amor no llegamos a conocer la nada y el ser y mucho menos su comunión en la respiración del biotejido.  

 

 

                

 

Escrito para los hombres – dioses: ‘’Yo no seré mi propia autenticidad a menos que, por el influjo de la voz de la conciencia, me lance hacia la muerte, con decisión resuelta, como mi posibilidad mas propia. En este momento, me develo a mi mismo en la autenticidad y también elevo a los demás conmigo hacia lo autentico...’’

Jean Paul Sartre 🤍

Del muro de Joel Agón   

 

                 


                                                                                                

 

 

sábado, 22 de febrero de 2025

La semilla del fruto santo

 

La semilla del fruto santo

Para alcanzar el fondo ontológico de Dios, la nada misma,  es imprescindible la fe

Y para alcanzar la máxima altura de la levedad del ser la razón es impulsada desde el fondo ontológico.

 

1→ (Fe) 0→10 (Razón impulsada desde el fondo ontológico logrando la concepción simbólica del ser)  

Y entonces ¿Porque la fe lejos de ser ese salto al vacío en el que se toca a Dios mismo en el logos. Se convierte en una creencia dogmática base de sistemas opresores?  

 

 

El director y guionista iraní Mohammad Rasoulof, que ganó la sección Una cierta mirada en Cannes en 2017 por Un hombre íntegro (Lerd) y el Oso de Oro en el Festival de Cine de Berlín en 2020 por su película La vida de los demás (Sheytan vojood nadarad), fue encarcelado en julio de 2022 por compartir comentarios públicos en los que denunciaba la represión gubernamental de los manifestantes en la ciudad suroccidental de Abadán por el derrumbe de un edificio en construcción donde murieron 41 personas y 37 resultaron heridas. 

 

 

La semilla del fruto sagrado (Danaye anjir-e moabad, 2024)

Rasoulof fue liberado temporalmente en febrero de 2023 debido a problemas de salud, y más tarde fue indultado y condenado a un año de servidumbre penal, así como a dos años de prohibición de abandonar Irán bajo el cargo de «propaganda contra el régimen», por lo que no pudo asistir a Cannes en 2023, donde había sido invitado a formar parte del jurado de la sección Una Cierta Mirada.

 

 

Confinado en el país, escribió y rodó La semilla del fruto sagrado (Danaye anjir-e moabad, 2024) en la clandestinidad, entre diciembre de 2023 y marzo de 2024 de manera irregular y ocasional. Cuando se encontraba en pleno rodaje recibió la noticia de que en un caso que ya estaba abierto contra él por hacer declaraciones públicas, películas y documentales considerados “ejemplos de connivencia con la intención de cometer un delito contra la seguridad del país”, se había decretado una sentencia de ocho años de cárcel, flagelación y confiscación de sus bienes. El caso fue llevado a un tribunal de apelación, y ese tiempo de espera, aunado a las dos semanas de vacaciones por las celebraciones del año nuevo iraní, le permitieron concluir la filmación. El tribunal de apelación confirmó la sentencia y Rasoulof tuvo que huir del país en compañía de algunos miembros del reparto y del equipo técnico, que pudieron todos refugiarse en Alemania tras 28 días de fuga.

2. Una película exiliada

En Alemania se hizo la postproducción del filme, tras sacarlo clandestinamente de Irán hacia Hamburgo. El veterano editor inglés Andrew Bird hizo el montaje, añadiendo a las escenas de ficción videos reales tomados por teléfonos móviles que muestran la represión estatal de las protestas desatadas en septiembre de 2022 por la detención y posterior fallecimiento de la joven Mahsa Amini, de 22 años, por presunta violación de la ley iraní sobre el hiyab obligatorio al llevarlo «de forma inapropiada», mientras visitaba Teherán. Tras el anuncio de que la película había sido escogida para hacer parte de la competencia oficial del Festival de de Cannes, el elenco y el equipo que permanecían en Irán fueron interrogados por las autoridades, se les prohibió salir del país y se les conminó para convencer a Rasoulof de que retirara la película del festival.

El 24 de mayo de 2024 Mohammad Rasoulof asistió a la premiere de La semilla del fruto sagrado en Cannes. En la alfombra roja llevaba en sus manos las fotos de sus dos protagonistas, Soheila Golestani y Missagh Zareh, que no pudieron salir de Irán. Lo acompañaban su hija Baran, la actriz iraní  Golshifteh Farahani, que lleva una década exiliada en Francia, y las dos actrices jóvenes de la película, Mahsa Rostami y Setareh Maleki, que huyeron de Irán y ahora viven en Berlín. Tras la exhibición en el Teatro Lumière, La semilla del fruto sagrado tuvo una ovaciónde casi quince minutos y posteriormente iba a ganar el Premio especial del jurado, el premio de la FIPRESCI y el premio del jurado ecuménico en Cannes. El National Board of Review la escogió como la mejor película internacional de 2024.   

3. Todo empieza por casa

Es un milagro que La semilla del fruto sagrado exista, pero es un milagro aún mayor que sea un filme tan excepcionalmente brillante. Se trata de una historia domestica –ajustada, por supuesto, a la imposibilidad de rodar en exteriores- sobre un recién ascendido juez de investigación, Imán (Missagh Zareh), que vive con su esposa Najmeh (Soheila Golestani) y sus dos hijas Rezvan (Mahsa Rostami) y Sana (Setareh Maleki). La primera está empezando la universidad, la segunda está aún en el colegio. Una amiga de Rezvan, Sadaf (Niousha Akhshi), que vive lejos, se queda con ellas una noche a espaldas de su padre, que por la naturaleza de su trabajo gubernamental debe ser muy reservado también de puertas para adentro. Incluso tiene un arma de dotación en casa. Ese trabajo suyo lo confronta y lo estresa, pues debe cumplir unas órdenes que contradicen su propia moral en bien de los intereses estatales. Su debate interior es enorme, pero Imán es en esta parte del filme un personaje secundario. La verdadera acción está en casa.

Mohammad Rasoulof  apuesta a que la revolución iraní será conducida por los jóvenes y más específicamente por las mujeres jóvenes. Aunque en la película no se menciona un motivo especifico, hay en las calles un ambiente de tensión y continuas protestas que Rezvan y Sana ven en sus teléfonos móviles y que ellas mismas atestiguan: clases canceladas, marchas, abusos policiales. Aunque Najmeh tiene prevenciones frente a Sadaf, nada puede hacer cuando la joven es violentamente golpeada y se refugia temporalmente en su casa. La mujer sabe que eso puede traerle problemas a su marido, pero pesa más la solidaridad con una joven que podría ser su propia hija. Hay en Najmeh la angustia de ver a su marido llegar a casa abrumado y de a la vez estar haciendo algo que podría perjudicarlo.

 

 

Las jóvenes también sospechan de la actividad laboral de su padre, pero no se imaginan el grado de paranoia que Iman demuestra cuando el arma de dotación desaparece en casa. Ahí empieza otra película, una muestra absoluta de excelencia fílmica. Mohammad Rasoulof   va a enseñarnos lo que el aparato de inteligencia estatal iraní hace con los capturados sospechosos, el tipo de interrogatorio y tortura psicológica y física que les aplica cuando quiere que confiesen algo. No va para ello a recurrir a un preso cualquiera: va a hacer que Iman y uno de sus colegas apliquen esto en Najmeh y sus hijas, que no pueden creer que su propio marido y padre las someta a esas humillaciones y prácticamente las secuestre, preso él de una neurosis –la pérdida del arma podría llevarlo a la cárcel y acabar con su carrera- que lo hace desconfiar de sus propios seres amados y nublar por completo su razón. Si esto puede hacer con su mujer y sus hijas, ¿qué no hará con un sospechoso cualquiera?  

 

 

La semilla del fruto sagrado es, como buena parte del cine iraní que escapa a la censura, una metáfora. Una que nos da cuenta de la deshumanización de unos funcionarios que están ciegos frente a un estado teócrata que no entiende de sensatez, razones, motivos y revoluciones que busquen la libertad. Un estado opresor que robotiza a los que le sirven y los convierte en autómatas, entes que sospechan de todos y capaces de lo inenarrable. Iman deja de ser esposo y padre para volverse una persona sin asomo de compasión. Ante eso ya poco o nada queda por hacer. 

 

 

 0 Espíritu lúdico

1 Sensibilidad religiosa

2 Percepción creativa

3 Entendimiento metadialéctico 

 4 Razón paradojal

 5 De poder resein  ←Voluntad iluminada  sein → de ser Dasein

 6 Inteligencia transferencial-desintegración-integración   

  7  Espíritu integrado←→ sinsein 

   8  Espíritu infernal

   9 Comunión de Amor Espíritu Santo

   10 Reino de Dios

   11 Juicio

   12  Resurrección nueva tierra nuevo cielo 

    13 Logos Alfa y omega-Bodas del cordero  

https://noblecoran.com/images/libros/coran-traduccion-isa-garcia.pdf?fbclid=IwY2xjawIltlBleHRuA2FlbQIxMAABHY6WDdqSS0dVk1PfBqJjSEBce2xB-hdI6SrF5XkBmAGiTutSuO6EA5miFA_aem_xmnbCUazF5PcdXHbCHKZLg  

 

 

Hola Christian! ¿Le interesa conocer sobre el islam?

Enter

Lun, 9:48 pm

Descubriendo islam

 

El islam es una religión monoteísta. Los seguidores del islam nos conocemos como musulmanes. Somos adoradores de un solo Dios, sin socios o algo similar. Al ser monoteístas, estamos sumisos a la voluntad de Dios. Esto significa que escuchamos y obedecemos a Dios. La base de nuestra fe islámica se encuentra en el Corán, nuestro libro sagrado. Creemos que el Corán fue revelado al profeta Muhammad (la paz sea con él) por Dios a través del ángel Gabriel. El Corán contiene enseñanzas y orientaciones sobre diversos aspectos de la vida, incluyendo la moralidad, la adoración, la justicia y la conducta personal. Valores de vida, y mas que religion es un estilo de vida. Seguimos cinco pilares fundamentales del islam. Estos son: 1. El testimonio de fe (shahada): Creemos en la unicidad de Dios y testificamos que no hay más Dios y que Muhammad es su siervo y mensajero. 2. La oración (salat): Realizamos cinco oraciones diarias. Estas oraciones son una forma de comunicación directa con Dios. 3. La caridad (zakat): Los musulmanes pudientes dan una porción de riqueza a los necesitados y a la comunidad en general. (Esto es para quienes puedan) 4. El ayuno (sawm): Durante el mes de Ramadán, ayunamos desde el amanecer hasta el anochecer como una forma de autodisciplina y solidaridad con los menos afortunados. 5. La peregrinación (hajj): Si tenemos los medios físicos y económicos, realizamos al menos una vez en nuestra vida la peregrinación a La Meca, en Arabia Saudita. Además de estos pilares, seguimos una serie de principios éticos que incluyen la honestidad, la justicia, la compasión y el respeto hacia los demás. En el islam, enfatizamos la importancia de la comunidad y la fraternidad entre los creyentes. También promovemos la igualdad entre hombres y mujeres, así como la importancia de la educación y la búsqueda del conocimiento.

 

 

Me queda claro por favor donde puede encontrar una buena traducción en español del Corán

 

 

https://noblecoran.com/images/libros/coran-traduccion-isa-garcia.pdf

muchas gracias

Enter

Enviaste

por favor según lea quiero hacerles preguntas para poder comprender

 

Si claro. Estamos atentos 

 

 

 

En la novela futurista Farenheit 451, un grupo de disidentes se oculta en los bosques para preservar libros. Su misión: mantener en sus memorias la mayor cantidad de textos posible, pues el gobierno los está quemando todos y pronto ya no quedará ninguno. Si eso ocurriera en nuestra realidad actual, solo un libro en todo el mundo tendría su supervivencia e integridad aseguradas, pues ha sido transmitido oralmente en una cadena ininterrumpida de memorizadores durante más de 14 siglos, y en la actualidad, decenas de miles de personas lo saben y lo recitan de memoria a diario por todo el planeta. Ese libro es el Corán. Históricamente la poesía árabe ha sido famosa por su belleza, los árabes siempre han tenido fama de grandes oradores. Sin embargo, muchos poetas árabes y mucha gente del común, acostumbrados a escuchar a diario en plazas y calles lo mejor de la poesía y la oratoria del mundo, lloraban conmocionados por la belleza y la fuerza incomparables del Corán cuando era recitado. Aún en nuestros días, musulmanes y no musulmanes en todo el mundo, incluso aquellos que no conocen el idioma árabe, se estremecen al escuchar la recitación del Corán. Un libro que no vale por la calidad de la tinta o del papel en que esté impreso ni por la antigüedad de su edición, sino por la fortaleza y actualidad de su mensaje. La fuerza del mensaje coránico se ve reflejada en múltiples cosas: en la forma en que logró que las tribus árabes dejaran de combatir entre sí y se unieran en el primer Estado en la historia de Arabia, y cómo convirtió a ese Estado en la civilización más avanzada e importante del mundo en menos de un siglo; en la forma en que animó el desarrollo de las ciencias y la tecnología, en una época en que toda Europa vivía sumida en el oscurantismo; en el impacto profundo que tuvo en la vida de personalidades como Goethe, Malcolm X, Cat Stevens, y el padre de la patria andaluza, Blas Infante. En la forma en que un puñado de comerciantes honestos convirtió a Indonesia en el país con mayor cantidad de musulmanes hoy día, mostrando con su ejemplo las bondades de vivir de acuerdo a las enseñanzas del Corán. Durante la Edad Media, cuando los ejércitos en todo el mundo tenían por norma saquear las ciudades que tomaban y asesinar a su población sin distinguir entre hombres, mujeres, niños y ancianos, ocurrieron tres acontecimientos históricos que son contundentes para mostrarnos el poder del Corán. El Profeta Mujámmad, Saladino y el sultán Mehmed II, conquistaron respectivamente La Meca (630 d.C.), Jerusalén (1187 d.C.) y Constantinopla (1453 d.C.), y cuando entraron a reclamar la victoria no saquearon las ciudades, y fueron incluso más allá, respetando la vida y propiedades de sus habitantes de diferentes credos. Todo esto siglos antes de que la convención de Viena escribiera el Derecho Internacional Humanitario. También encontramos en el Corán información científica sorprendentemente exacta, que ha venido siendo corroborada por la ciencia moderna y que ha inspirado a científicos importantes a incluir versículos coránicos en sus conferencias. Entre ellos se cuentan el Dr. Persaud, ganador del premio J.C.B. Grant, otorgado por la Asociación Canadiense de Anatomistas; el Dr. Marshall Johnson, expresidente de la Asociación Teratológica de Estados Unidos; el Dr. Keith Moore, expresidente de la Asociación Americana

de Anatomistas Clínicos; el Dr. Tejatat Tejasen, exdecano de la facultad de Medicina de la Universidad Chiang Mai en Tailandia; el Profesor Yashudi Kusan, exdirector del Observatorio Astronómico de Tokio en Japón; y el famoso cirujano francés Dr. Maurice Bucaille, autor del libro La Biblia, el Corán y la Ciencia, donde concluye que solo Dios pudo revelar el Corán. El Corán incluye una amplia gama y diversidad de temas: historias de los profetas y de los pueblos de la antigüedad, lecciones morales, normas para llevar una vida sana, tranquila y honesta; leyes para construir una sociedad equitativa que asegure a todos sus miembros dignidad, seguridad y justicia; profecías, de las cuales algunas ya se han cumplido; datos científicos desconocidos por el ser humano hasta el siglo XX; una teología clara y sencilla, pero a la vez profunda y completa; descripciones de la vida en el más allá, palabras de consuelo para los creyentes, respuestas directas a las preguntas básicas que siempre han intrigado a la humanidad. Todo ello con una belleza poética y narrativa inigualable, tanto que en sus propias páginas el Corán reta a los seres humanos a crear un texto que pueda igualarlo. Incluso el Quijote, considerado la mejor obra literaria jamás escrita, y las obras de Shakespeare, han sufrido plagio. Estos y muchos otros ejemplos comprueban que por muy grande que pueda ser un escritor, siempre es posible imitar su estilo, su obra, y confundir incluso a lectores expertos. Pero aunque muchas veces se ha intentado plagiar, imitar o incluso modificar el Corán, ha sido imposible. La revelación de este libro sinigual comenzó con un evento perturbador. Mientras se encontraba solo en una cueva donde solía alejarse del mundo para rezar y reflexionar, el profeta Mujámmad, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, sintió el abrazo asfixiante de un ser brillante que lo tomó por sorpresa. Sin posibilidad de escape y sintiéndose cerca de la muerte, escuchó a este ser darle una orden: “¡Lee, en el nombre de tu Señor!” Ese fue el primer versículo coránico en ser revelado, que corresponde al capítulo 96, versículo 1. En un principio, temiendo ser tomado por loco, no habló de lo ocurrido más que con su esposa Jadiya, que lo escuchó con paciencia mientras él temblaba de miedo entre sus brazos. Ella fue la primera en reconocer que se trataba de un mensaje de Dios, y fue la primera persona que creyó en la profecía de Mujámmad, incluso antes que el propio Mensajero. El ser que había atemorizado al Profeta no era otro que el ángel Gabriel, el mismo que le había anunciado a María que sería la madre virgen de un profeta creado por Dios en su vientre: Jesús. La historia de Jesús y su madre también sería revelada como parte del Corán, en el capítulo 19, titulado “María”. El ángel volvió a presentarse ante Mujámmad muchas veces para transmitirle el mensaje divino. El Corán fue revelado de manera paulatina durante los siguientes 23 años, tiempo en que los seguidores del Profeta llegaron a ser más de cien mil. Gradualmente, la comunidad de musulmanes no solo creció en número, sino que fue tomando forma de nación y de Estado, hasta convertirse en la civilización más influyente de la Tierra. Menos de un siglo después de la muerte del Profeta, el mensaje coránico había llegado a todo Oriente Medio, el norte de África, Asia central hasta China e India, y la Península Ibérica. Hoy día, el Corán es el Libro Sagrado de más de 1.300 millones de musulmanes, que lo recitan durante sus cinco oraciones diarias en todo el mundo. Si bien el Corán fue revelado en árabe y la nación islámica se formó originalmente en Arabia, actualmente los musulmanes árabes son menos del 20% de todos los musulmanes del mundo. Datos recientes han revelado que existen más musulmanes en Alemania que en el Líbano, y más en Rusia que en Jordania y Libia juntas, superando los 6 millones en Francia. Desde la década de 1970, el Islam se ha mantenido como la religión de mayor crecimiento en el mundo, y el Vaticano ha reconocido que desde 2006 el Islam tradicional (sunismo) se ha convertido en la denominación religiosa con mayor número de fieles en el planeta, dejando al Catolicismo Romano en segundo lugar. En América Latina y el Caribe el Islam crece a diario, especialmente entre la población femenina, y es también la religión de más rápido crecimiento entre la comunidad latina de Estados Unidos. Por todo el globo, en cada comunidad islámica hay musulmanes que han aprendido de memoria fragmentos del Corán en árabe, y en muchas de ellas hay al menos un musulmán que lo ha memorizado por completo, convirtiéndolo en el libro más leído y memorizado en la historia. También han aparecido a lo largo de la historia, traducciones de su mensaje a más de 100 lenguas.

 

Recopilación y preservación del Corán A medida que el Profeta Mujámmad, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, iba recibiendo la revelación divina, sus escribas la iban poniendo por escrito en diferentes materiales: cuero, cortezas de árboles, huesos… Al mismo tiempo, el Profeta recitaba a sus seguidores cada nueva parte revelada, recitaba diferentes fragmentos del Corán todos los días durante las oraciones, y todos los años durante el mes de Ramadán recitaba en público lo que le había sido revelado hasta ese momento. Muchos de quienes lo escuchaban, escribían partes del Corán, y muchos otros lo memorizaban. Cuando él murió, existían muchos fragmentos escritos del Corán, también había docenas de musulmanes que lo sabían de memoria. Uno de ellos era Zaid ibn Zabit, quien fue escriba del Profeta. Por órdenes de Abu Bakr, primer califa de la nación islámica, Zaid encabezó un comité que se encargó de reunir todos los fragmentos existentes del Corán, corroborarlos con los memorizadores más prominentes, y poner el texto por escrito en forma de libro. Este primer manuscrito fue terminado y aprobado por los compañeros del Profeta unos dos años después de su muerte. Aproximadamente diez años después de esta compilación, el tercer califa, Uzmán, convocó al mismo Zaid a formar parte de otro grupo de compañeros del Profeta y memorizadores del Corán, quienes tomaron este manuscrito e hicieron varias copias del mismo, que fueron distribuidas por todo el vasto territorio islámico. Algunas de esas copias se conservan aún en el museo de Tashkent en Uzbekistán, en el museo de Topkapi en Turquía, y dos en Egipto, en la mezquita Al Husein y en la Biblioteca Nacional. Otra fue conservada en Siria hasta 1892 cuando un incendio la destruyó, pero para entonces ya se habían hecho copias de la misma. Diferentes personas y organizaciones han comparado, a lo largo del tiempo, estas copias con manuscritos antiguos de diferentes épocas y ediciones recientes del Corán, comprobando una y otra vez que el texto coránico que hoy se recita a diario en las mezquitas de todo el mundo, es exactamente el mismo que el Profeta, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, enseñó a sus compañeros, que Dios esté complacido con ellos. 

 

El Corán no solo ha sido preservado intacto en su forma escrita, sino que siempre han existido memorizadores que lo han transmitido de forma oral, enseñando no solo su contenido sino las formas correctas de recitarlo. Además, también se ha registrado y preservado la vida del Profeta Mujámmad, quien siempre vivió en estricto cumplimiento del texto coránico. Cuando comparamos las copias escritas del Corán con las recitaciones trasmitidas de generación en generación, y con las tradiciones del Profeta, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, encontramos una coherencia y unidad que nos comprueban, sin lugar a dudas, que el Corán no ha sufrido alteración alguna. El Islam y sus pilares “Lee”. Con esa orden directa, se inició una nueva etapa en la vida de toda la humanidad. En una cueva oscura, en el interior de una montaña en medio del desierto, la voz del ángel Gabriel retumbó repitiendo las palabras de Dios: “Lee, en el nombre de tu Señor”. Nadie podría haber sospechado que en ese instante cambiaba el curso de la historia del hombre. Pero ese no fue el inicio del Islam. El Islam comenzó con la creación del universo. Como concepto, Islam significa someterse a la voluntad de Dios. Es lo que han enseñado todos los profetas, de Noé a Abraham, de Moisés a Jesús. El mensaje del Islam ha sido el mismo desde el inicio del tiempo, y permanecerá inalterado hasta su final: solo existe un Dios, Uno y Único, y solo a Él debemos alabar y pedir ayuda, pues toda fuerza proviene de Él y nada ocurre en el universo sino por Su voluntad. Con la revelación del Corán se recuperó el mensaje y el espíritu originales de las revelaciones anteriores (la Tora, los Salmos y el Evangelio), y la religión eterna de Dios recibió el nombre de Islam. Desde entonces, Dios nos anuncia que Mujámmad es Su último enviado, Sello de la Profecía, y que el Corán es Su última revelación, que Él mismo mantendrá preservada hasta el Día del Juicio. El Islam no es, en sentido estricto, una religión; más bien es una forma de vida. Como toda religión, establece la moral y la creencia, y regula en buena parte el comportamiento y modales de las personas que la siguen. Pero a diferencia de las demás religiones, el Islam establece también un sistema   político y de gobierno, un sistema financiero y económico, un sistema social, una filosofía de vida, unas políticas de preservación medioambiental, todo enmarcado en principios universales de respeto a la vida, la dignidad y la propiedad de las personas, de cooperación, solidaridad y justicia entre los hombres y entre las naciones, de trato amable hacia todas las personas (incluyendo los enemigos) y los animales, y de obediencia estricta a las leyes de Dios. La primera palabra de la revelación del Corán enmarca el espíritu islámico de amor por el conocimiento. El Islam enseña que la fe no puede ser ciega, sino que tiene que nacer y fortalecerse con el conocimiento. No hay mayor enemigo de los pueblos, ni mayor amigo de los tiranos y los opresores, que la ignorancia. Y nadie está en mayor peligro de caer en fanatismos y extremismos que quien cree algo a ojos cerrados, incluso en contra de su propia lógica. “Lee”. Conoce tu religión y practícala, conoce tus derechos y exígelos, conoce tus obligaciones y cúmplelas; aprende qué es lo bueno, hazlo y promuévelo; aprende qué es lo malo, condénalo y aléjate de ello. Tal es la importancia de esta orden, que cuando el Profeta Mujámmad se vio obligado a combatir para defender a su comunidad y tuvo que afrontar el asunto de los prisioneros de guerra, en un acto sin precedentes en la historia, ordenó a sus hombres que liberaran a todo aquel que enseñara a leer y escribir a cinco musulmanes. El conocimiento, además, nos une. Los musulmanes tenemos un objetivo en común: servir a Dios. Nos alejamos de las mismas cosas: de aquello que Dios ha prohibido. Buscamos realizar a diario las mismas cosas: aquello que agrada a Dios. Bebemos de la misma fuente del conocimiento: el Corán y las tradiciones auténticas del Profeta Mujámmad, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él. Cuando un musulmán se orienta hacia La Meca y comienza a recitar en árabe el primer capítulo del Corán mientras realiza su oración, puede estar seguro de que en ese mismo instante, en diferentes lugares del mundo, otros musulmanes están orientados hacia el mismo lugar, pronunciando exactamente las mismas palabras, mientras rezan de la misma forma que él. Al crearnos, Dios nos dio alma así como cuerpo. Por ello, el Islam descansa sobre seis pilares de la fe, que deben estar presentes en el alma y el corazón del musulmán, y sobre cinco pilares prácticos de adoración a Dios y servicio al prójimo, que el musulmán debe cumplir con su cuerpo y su mente. Sin los primeros, la adoración se convierte en una serie de rituales vacíos, carentes de sentido, meros ejercicios físicos. Y sin los segundos, la fe se convierte en palabras huecas, pues no se manifiesta externamente y, por tanto, es incapaz de transformar la vida y la sociedad del creyente. Los seis pilares de la fe son: 1. Creer en Dios, glorificado y alabado sea, Creador de todo cuanto existe, indivisible, Quien no tiene copartícipes ni asociados, es Dueño y Señor de la creación y no comparte Su Señorío; no ha engendrado ni ha sido engendrado, no necesita de nada ni de nadie y todos necesitamos de Él; no hay nada ni nadie que Se le asemeje, todo proviene de Él, y por lo tanto solo Él merece ser adorado. 2. Creer en los ángeles, criaturas de luz creadas por Dios para servirlo, que la paz sea con todos ellos. No tienen libre albedrío, por lo que les es imposible rebelarse contra Él. 3. Creer en los libros revelados. Dios ha revelado a los seres humanos Su mensaje y Sus leyes muchas veces en la historia. Entre los libros que Dios ha revelado están la Tora, los Salmos, el Evangelio, y muchos otros que no conocemos. Sin embargo, todos estos libros han sido modificados, alterados y tergiversados con el paso del tiempo, por lo que solo el último de ellos, el Corán, es la palabra de Dios, pues es el único que se conserva inalterado. 4. Creer en los profetas. En todos los tiempos, Dios ha enviado profetas y mensajeros a todos los pueblos, y todos ellos proclamaron el mismo mensaje de unicidad del Creador. Desconocemos a la mayoría de ellos, pero sabemos que el último de los profetas, Mujámmad, siguió el mismo camino trazado por todos, incluyendo a Moisés y a Jesús, por lo que seguir a Mujámmad es seguir a sus antecesores. 5. Creer en el Día del Juicio. Esta vida es pasajera, estamos aquí para adorar y servir a Dios, y todos moriremos. Pero un día, seremos resucitados y tendremos que rendir cuentas ante Dios de todas nuestras obras. Ese día cada quien recibirá lo que merece, nadie será tratado con injusticia, y unos entrarán al Infierno, mientras otros entrarán al Paraíso.

Creer que todo proviene de Dios, lo agradable y lo desagradable. Nada ocurre sino con el permiso de Él, y ni un átomo del universo se mueve sino por Su voluntad. Él nos ha concedido el libre albedrío, pero en su infinito conocimiento lo sabe todo antes de que suceda. Él es Quien determina nuestro destino, y por ello, nadie puede beneficiarnos ni perjudicarnos más allá de lo que Él decreta para cada uno de nosotros. Los cinco pilares prácticos de adoración son: 1. La declaración de fe: Una persona ingresa al Islam al decir de forma libre y consciente lo siguiente: “Atestiguo que no existe divinidad salvo Dios, y atestiguo que Mujámmad es Su siervo y Mensajero”. Esta profesión de fe es repetida por los musulmanes a diario en sus oraciones y otras actividades. Decir esto implica abandonar cualquier acto de culto a santos, ídolos, ancestros, líderes o criaturas, y adorar solo a Dios Todopoderoso. Implica también que aceptamos a Mujámmad como Mensajero de Dios, como nuestro guía, y al aceptarlo a él se aceptan a todos los profetas y mensajeros anteriores. 2. La oración: Es obligación realizar cinco oraciones diarias (al alba, a mediodía, a media tarde, al ocaso y en la noche). La oración debe realizarse siguiendo unos pasos rituales específicos y tras una purificación ritual. El creyente puede, además, realizar oraciones voluntarias durante el día o la noche. La oración puede realizarse en solitario o en comunidad, en la mezquita o en cualquier lugar limpio que no sea utilizado como lugar de adoración a deidades falsas. 3. El zakat: El pudiente está obligado a entregar un 2.5 % de su ahorro anual para obras de caridad. El zakat garantiza la redistribución de la riqueza, una preocupación reciente en el mundo occidental, pero que está contemplada desde hace más de 1.400 años en el Islam. Adicional al zakat, el Islam anima a los creyentes a brindar caridad a diario. La caridad no se entiende solo como un asunto monetario. Siempre que el musulmán ayuda a otra persona, busca su bienestar, incluso con una sonrisa, está haciendo caridad. El trabajo en pos del bienestar colectivo, como retirar obstáculos de un camino o poner anuncios de peligro para evitar accidentes, también se considera una forma de caridad. 

 

4. El ayuno: Es obligación ayunar durante todo el mes de Ramadán cada año (el noveno mes del calendario lunar islámico). El ayuno se realiza cada día desde el alba hasta el ocaso, pudiéndose comer y beber durante la noche. El ayuno purifica el cuerpo, fortalece la voluntad y ayuda al creyente a concientizarlo por experiencia propia sobre lo que sienten a diario los más necesitados. Ayunar y romper el ayuno en comunidad, compartiendo el hambre durante el día y la comida durante la noche, estrecha y fortalece los lazos sociales y familiares. También se pueden realizar ayunos voluntarios en otras épocas del año. 5. La peregrinación a La Meca: Todo musulmán y toda musulmana que esté en capacidad física, mental y económica de realizar la peregrinación, debe hacerla al menos una vez en su vida. Esta es la mayor peregrinación religiosa del mundo, cerca de tres millones de personas se reúnen en la Mezquita Sagrada de La Meca cada año y hacen la oración al unísono como parte de los rituales de la peregrinación. “Lee”. No existen intermediarios entre el creyente y su Creador, por eso no hay clero en el Islam. El conocimiento está a disposición de quien lo busca, y es obligación de todo musulmán, hombre o mujer, buscarlo durante toda su vida. Pero no olvides lo esencial: “¡Lee, en el nombre de tu Señor!” No busques el conocimiento para tu gloria personal. Sé humilde y busca el conocimiento para agradar a Dios y trabajar por Su causa. Esa es la esencia de seguir el Islam, de ser musulmán. El Profeta Mujámmad, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él “Lee”. La orden que cambió el curso de la historia fue dada por Dios, a través del ángel Gabriel, a un analfabeto. “No sé leer”, respondió aterrado Mujámmad, inocente del destino para el que había sido preparado toda su vida. “¡Lee, en el nombre de tu Señor, Quien ha creado todas las cosas!”, le replicó el ángel. A sus 40 años de edad, el Profeta Mujámmad era muy conocido en su ciudad, La Meca. Todos sabían que era un comerciante exitoso y honrado, dirigente de caravanas, esposo de una rica empresaria mayor que él, y le tenían un profundo respeto. Lo apodaban “El Confiable” y era famoso por su  honestidad y su habilidad para la mediación de conflictos. Su palabra valía más que cualquier contrato. Pero había una virtud que no poseía: a su edad, resultaba evidente para todos que Mujámmad no era un gran orador ni un poeta. Y sin embargo, un día, por un milagro que en un comienzo muy pocos aceptaron, Mujámmad superó a todos los grandes oradores y poetas, e hizo temblar la estructura social de La Meca desde sus cimientos, con una recitación tan excelsa, hermosa y magnífica, como revolucionaria y radical. Los hombres no son más valiosos que las mujeres ni lo contrario. Los árabes no son mejores que los no árabes ni lo contrario. Los blancos no están por encima de los negros ni lo contrario. Los ricos tienen la obligación de ayudar a los pobres, las mujeres son libres de tener posesiones y comerciar, y todos tienen derecho a la educación y a una vida digna. No existe más que un único Dios verdadero, que no tiene forma humana, que no puede ser representado en forma alguna, y que es tan Compasivo como Justo, tan Poderoso como Benévolo, tan Severo como Amoroso. Y nadie, ni reyes ni profetas, ni artistas ni indigentes, ni sabios ni empresarios, absolutamente nadie está por encima de la Ley de Dios ni tiene derecho a cambiarla en lo más mínimo. Semejantes ideas convirtieron a Mujámmad y a sus compañeros en perseguidos. Mujámmad nació en La Meca, Arabia, en el año 570 d.C., y quedó huérfano desde edad temprana. Pasó necesidades. Trabajó desde pequeño, fue pastor y se forjó una buena vida. A sus 40 años se encontraba en su mejor momento. Pero en cuanto comenzó a transmitir la revelación divina, la vida se le fue haciendo cada vez más difícil. Fue víctima de burlas, discriminación, insultos y distintos tipos de ataques, cada vez peores y más frecuentes. Él y sus compañeros fueron sometidos a hambruna, ostracismo y persecución. Luego comenzaron las torturas y los asesinatos de sus compañeros. La situación era tan grave, que el Profeta envió a un grupo de ellos a refugiarse en Etiopía, donde fueron protegidos por un rey cristiano. Trece años después que comenzara la revelación del Corán, el profeta Mujámmad, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, lo había perdido todo: su reputación arruinada, sus negocios destruidos, su esposa había muerto, su riqueza y propiedades confiscadas, algunos de sus compañeros habían sido asesinados y otros se habían exiliado, y su tío y único protector tribal acababa de morir. Ahora pendía sobre él una amenaza de muerte y  solo le quedaba emigrar junto con sus seguidores, cuyo número apenas había excedido el centenar en trece años de prédica incansable y difícil. Si hubiera sido un profeta falso, a este punto de la historia ya se habría dado por vencido. ¿Qué objeto tenía insistir en una religión que en lugar de darle fama, poder y dinero, le había arrebatado todo lo que había logrado en su vida? Años atrás, los dirigentes de La Meca, el clan de los Quraichitas, le habían ofrecido nombrarlo su rey y convertirlo en el hombre más rico y poderoso de Arabia. Pero Mujámmad, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, no procuraba satisfacer sus gustos, sus deseos ni sus necesidades. No tenía afán de gloria o riqueza. Solo estaba cumpliendo con la misión que Dios mismo le había encargado, y estaba dispuesto a pasar por todas las penurias que Dios le pusiera en el camino. Así que a sus 53 años, el Profeta decidió emigrar con su gente. Setenta musulmanes viajaron hacia el oasis de Yazrib. Una vez que estuvieron allí a salvo, el Profeta se dirigió a su encuentro en compañía de su mejor amigo, Abu Bakr As Sidiq, quien lo sucedería tras su muerte como primer califa de los musulmanes. Fue un viaje duro a través del desierto, con sus enemigos persiguiéndolo de cerca. Este suceso, conocido como hégira, marcó el inicio del calendario islámico. Los pobladores de Yazrib cambiaron el nombre de la ciudad por el de Madinat Unnabi (la ciudad del Profeta) y allí el Profeta fundó el primer Estado islámico. Se convirtió en gobernante, y aun así llevó una vida austera, al punto de dormir en una estera de cuero rellena de hojas de palma. Bajo su mando, Madina se convirtió en una ciudad próspera en muy poco tiempo, y sus enemigos sintieron celos de su éxito y temor de que regresara a cobrar venganza. Los Quraichitas se armaron y salieron a destruir a la nación musulmana. Con el permiso divino y siguiendo las normas estrictas relacionadas con la guerra que fueron reveladas en el Corán, los musulmanes organizaron para defenderse un pequeño ejército, que de manera milagrosa venció en la primera batalla a una fuerza que lo triplicaba y que estaba mucho mejor preparada y armada. Más tarde, tras cinco años de batallas, unas ganadas y otras perdidas, el Islam había crecido a tal punto que Mujámmad, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, se presentó a las puertas de La Meca con un ejército de más de 10.000 hombres. Entró a la ciudad sin  derramar una sola gota de sangre. Vio a la cara a aquellos que lo habían insultado, perseguido y atormentado durante años, los mismos que habían intentado asesinarlo, que habían ultrajado a sus compañeros, y que habían enviado ejércitos en su contra. No tomó represalias contra ellos. Respetó sus vidas y sus propiedades, e incluso aceptó como hermanos a todos aquellos que decidieron abrazar el Islam. Solo tres años después, enfermó y murió. Comerciante, líder religioso, estadista, maestro, juez, estratega militar, soldado, administrador, diplomático, amigo, esposo, padre, consejero, reformador, profeta, hombre. La vida de Mujámmad está detallada como la de ningún otro personaje de la historia. Una vida que es un modelo a seguir. El astrofísico estadounidense Michael Hart publicó en 1978 su listado de las cien personas más influyentes de la historia. En el número uno ubicó al Profeta Mujámmad, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, por su tremendo éxito tanto en el campo secular como en el campo religioso. Este reconocimiento es uno de muchos que se vienen dando en el mundo occidental, que a pesar de la mala prensa que se le da continuamente al Islam, está valorando cada vez más sus enseñanzas y el ejemplo de vida del Profeta Mujámmad, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él. Solo resta decir: “¡Lee, en el nombre de tu Señor, Quien ha creado todas las cosas!” (Corán 96:1) 

 

 1 En el nombre de Dios

 , el Compasivo con toda la creación, el Misericordioso con los creyentes

 2. Todas las alabanzas son para Dios, Señor de todo cuanto existe,

3.  el Compasivo, el Misericordioso.

 4 Soberano absoluto del Día del Juicio Final,

 5. solo a Ti te adoramos y solo de Ti imploramos ayuda.

6. ¡Guíanos por el camino recto!

7. El camino de los que has colmado con Tus favores, no el de los que cayeron en Tu ira, ni el de los que se extraviaron.

 

Al-Fátihah الفاحتة : La Apertura, el Inicio [del Corán]. Los títulos de los capítulos no son parte constitutiva de la revelación coránica. A menudo una palabra en particular perteneciente al capítulo o que definía el tópico principal de éste, se volvía común entre los compañeros del Profeta y los sabios posteriores como forma de referirse a dicho capítulo, y de allí derivaba en nombre. Aunque algunos nombres como Al-Fátihah fueron usados por el Profeta, que la paz y las bendiciones de Dios sean con él, para referirse a un capítulo en particular, no fueron designados por él como título. 2 Al-lah الله : Es un nombre propio exclusivo de Dios, el Único y Todopoderoso, Creador y Sustentador de los cielos y la Tierra y de todo lo que hay en ellos, el Eterno y Absoluto, el merecedor de toda forma de adoración. La forma de pronunciarlo es la siguiente: “Al-laj”, con la “jota andaluza” suave y aspirada, o la hache inglesa, enfatizando en la pronunciación de la “L”. Es sabido que cada idioma tiene uno o varios términos para referirse a Dios y, en ocasiones, para otras deidades. Éste no es el caso de “Al-lah”. “Al-lah” (del árabe al-ilah: el Dios) es el único nombre de Dios, no tiene género ni plural; por tanto, es un término que señala la unidad de lo designado. Cuando los contemporáneos del Profeta le preguntaron acerca de Dios, él recibió como revelación del capítulo 112, que resume la esencia del monoteísmo y unicidad de Dios: no ha engendrado, no ha sido engendrado, nada ni nadie es semejante a Él. El Islam rechaza cualquier intento de caracterizar a Dios, y menos aun tomando rasgos humanos que hagan prevalecer a una raza sobre las demás. 3 Ar-Rahman الرمحن y Ar-Rahim الرحيم son dos palabras derivadas del árabe rahma رحم , que significa misericordia. En la lengua árabe ambos tienen el significado superlativo de “Misericordiosísimo”. Mediante la cita de ambos nombres se intenta dar un significado más completo. Ar-Rahman, traducido como el Compasivo, implica un significado más amplio, que es misericordioso hacia toda la creación. La justicia es parte de esta compasión. Ar-Rahim, traducido como Misericordioso, incluye el concepto de especificidad, es decir, una forma especial de misericordia concedida solamente a los creyentes. El perdón es parte de esta misericordia. 4 Cuando se refiere a Dios, el término árabe Rabb - ّ رب , traducido como “Señor”, incluye los significados de poseedor, amo, gobernante, controlador, sustentador, proveedor, guardián y cuidador 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Acabo de leer los seis pilares de la fe del Corán  yo comprendo que para alcanzar el fondo ontológico de Dios, la nada misma,  es imprescindible la fe

Y para alcanzar la máxima altura de la levedad del ser la razón es impulsada desde el fondo ontológico.

 

1→ (Fe) 0→10 (Razón impulsada desde el fondo ontológico logrando la concepción simbólica del ser)  

Y entonces ¿Porque la fe lejos de ser ese salto al vacío en el que se toca a Dios mismo en el logos. Se convierte en una creencia dogmática base de sistemas opresores?  

Esto en clara relación al régimen iraní https://www.tiempodecine.co/web/una-revolucion-domestica-la-semilla-del-fruto-sagrado-de-mohammad-rasoulof/?fbclid=IwY2xjawIlkC1leHRuA2FlbQIxMQABHVYuvkq7voxim2vN_VTJv7iVFQOttm_AohCPIVULpm48_gcyivhXiw0yag_aem_TqRFboFGRI84G3PR7BpRbA y la represión que ejerce a películas como la semilla del fruto sagrado.

Y entonces ¿Es la Fe del Corán un salto al fondo ontológico que yo vivo cuando leo a rumi o una determinación que no escapa al árbol de la ciencia del bien y mal? 

Muchas gracias por atender mi pregunta bendiciones  

 

La respuesta fue la dirección de su sitio web:

 

https://www.google.com/url?sa=t&source=web&rct=j&opi=89978449&url=https://islamhouse.com/landing-es/&ved=2ahUKEwir__7fgvyHAxUk5MkDHT44NBgQFnoECBkQAQ&usg=AOvVaw2gAV1A6fgWvkq857RYC8c0

 

Y entonces no me queda a mi más remedio que inventarme una respuesta en el islam en su teología no hay nadie como Duns Scoto     

 

https://www.youtube.com/watch?v=YRbaVYvic1o&t=1s  

 

En Duns Scoto la voluntad se impone ante la razón y el gran golpe al Aristotelismo se logra ¿Pero porque Duns Scoto triunfa en la modernidad? 

Pues por la revolución industrial que hace que la voluntad construya la realidad  y entonces el realismo aristotélico se hace imposible y en todas las ideológicas, liberales, comunistas, fascistas se impone la voluntad así la idea de un Dios omnipotente no coactado por la razón, que tiene la base en la libertad negativa proyecta a un hombre moderno incapaz de pensar el bien común como una realidad que nos una a todos aun en el marxismo  es la voluntad la base de toda revolución e historia y que decir de los conservadurismos que en la práctica son fascismos imponiendo su voluntad.

 

En cambio en el islamismo aún existe una libertad positiva donde nuestra razón  es guiada  por lo sagrado y es que el cristianismo  a diferencia del judaísmo santifica lo profano que al final es santificar nuestra voluntad en su potencial progresivo así la voluntad cristiana que busca construir el reino de Dios en el futuro choca contra la razón  aristotélica que busca la preservación de un justo medio, equilibrado, moderado, ganando la voluntad que es fe y como fe voluntad omnipotente y entonces podemos decir que la razón griega es aun sagrada y que no tiene como horizonte la transformación dela realidad sino la vuelta a un acto puro a una sustancia de lo real donde la conciencia se conoce a sí misma, en un estasis inmóvil sin transformación ni progreso.

El grave problema de occidente es que renuncia a la libertad positiva, a la búsqueda de la sabiduría, el gran problema de oriente es que no hay o no había  libertad negativa, base para que la voluntad transforme la realidad y entonces occidente se escandaliza cuando oriente viola las libertades negativas y coacta a su población, exigiéndole a oriente una verdadera libertad religiosa.

 

https://themaydan.com/2019/08/islam-and-four-essential-freedoms/

 

Y oriente se escandaliza de occidente llamándolo la bestia porque jamás logra poner por encima el bien común basándose en el egoísmo, defendiendo los derechos como dados por Alá   

 

https://www.sapienceinstitute.org/restringe-el-islam-la-libertad/      

       

   Para nosotros es claro que ni la fe de occidente, ni la fe de oriente está en el dharma divino y es que la fe exige una muerte a la propia voluntad a su deseo:

 

v. 1. Declarados, pues, justos mediante la fe, tenemos 1 paz con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo. <  

 

<<Declarados, pues, justos mediante la !e». «La noche va muy

avanzada y se acerca ya el día» (13,22). Si osamos contar con

nuestra fe, debemos atrevernos también a contar con el «nosotros» caracterizado mediante la fe, con el hombre nuevo, elhombre del día de Dios, que no ha despuntado aún, pero que

está ya cerca. Mediante la fe entramos en el estado de los declarados justos por Dios.

Nosotros no sólo somos lo que somos, sino que, mediante la fe, somos lo que no somos. Lo que emerge en la vida humana de cada día en «pasión infinita» (Kierkegaard), de modo invisible, visible sólo como vacuum, lo que toda comprensibilidad humana niega siempre y por doquier, testimoniándolo así siempre y por doquier, lo que visto desde nosotros aparece sólo como el punto cero entre dos extremos de hipérbola que se pierden en el infinito y que, como tal, es, de modo inaudito, final y comienzo, eso es el hombre nuevo, el sujeto del predicado «fe». No soy yo este sujeto en cuanto que él como sujeto, como lo que él es, me trasciende de modo absoluto, difiere radicalmente de cuanto yo soy. Y soy ese sujeto en cuanto que lo que él hace, su predicado: la fe, consiste precisamente en establecer la identidad entre él y yo. Bajo el signo del morir y resucitar de Cristo (4,25), en el conocimiento de Dios que da vida a los muertos y habla como existente a lo no existente (4,17), nace el hombre nuevo, «nazco de arriba» (J n 3,3) yo: el que en el sentido más fuerte no es el mismo, se convierte en el mismo que soy yo. Pero esa mi inaudita identidad con el hombre nuevo es verdad sólo en virtud de esa predicación. Sólo mediante la fe soy lo que (¡ no l) soy. Si dejo de tener en cuenta por un solo instante la arriesgada empresa, si queda en suspenso por un solo instante, si no la emprendo (¡como si nunca la hubiera emprendido aúnl), entonces el establecimiento de esa identidad es un hecho insignificante de arrogancia religiosa o especulativa. Ese establecimiento tiene que ser siempre dialéctico, debe estar empapado por la consideración de que el hombre no es Dios. Tenemos que resultar sospechosos para nosotros mismos en todo instante en que osemos contar con que creemos. Sumamente extraña debe parecernos de continuo la necesidad y posibilidad de penetrar en la vida a través de la estrecha puerta que da paso de la vida a la muerte. Tiene que resultamos altamente inaccesible el camino, incomprensible el orden, inalcanzable la fuerza que continúan más allá de esa puerta estrecha; deberá resultamos altamente peligroso intentar avanzar allí, aunque sea un solo paso. Costumbre, comodidad, ligereza y obviedad en este funto de inflexión son la mentira, la maldición primigenia, e germen venenoso casi imposible de exterminar en toda o en casi toda dogmática, predicación, labor pastoral y aserto religioso de todo tipo. La verdad de que nosotros somos hombres nuevos subsiste para nosotros, siempre y por doquier, sólo en su punto de partida. Y este punto de partida significa para nosotros el final de toda visibilidad y comprensibilidad. Sólo en el final del hombre viejo puede resultamos visible el comienzo del hombre nuevo; sólo en la cruz de Cristo pueden resultar perceptibles el sentido y la realidad de su resurrección. Lo único que podemos siempre y por doquier -y siempre y por doquier de nuevo- es creer, también creer que creemos. Es del todo imposible dar un perfil perceptible, histórico y psicológico, del creyente en comparación con el no creyente. Las manos de todos nosotros están vacías para nuestros sentidos. «Nosotros somos como hierbas en el borde fértil superior de una montaña empinada, en la altitud en la que falta ya, casi por completo, toda vegetación. Abajo, en la hondonada de los valles, crecen encinas con sus raíces enterradas en lo profundo del suelo. Pero nosotros somos los débiles, pequeños, apenas visibles desde el valle; estamos a merced de todos los vientos y tormentas, casi sin raíces, casi marchitos. En cambio, cuando, muy de mañana, la sombra envuelve aún las copas de las encinas, nosotros somos bañados ya por la luz; vemos ya lo que nadie ve aún; somos los primeros en ver el sol del gran día; somos los primeros en decir: "¡ Señor, ven de verdad 1 "» (Mereschkowski). Por consiguiente, sólo mediante la fe, siendo los primeros que son los primeros por ser los últimos, creciendo porque decrecemos, siendo grandes por ser pequeños, siendo fuertes en nuestra debilidad, somos justos ante Dios: Dios se justifica a §í mismo ante nosotros, pero, con ello, nos justifica él ante sí. El nos hace prisioneros, pero con ello nos libera. Nos niega como somos y, negándonos, nos afirma como aquellos que nosotros no somos. El nos necesita y, con ello, comienza su buena obra en nosotros. Toma partido por nosotros y, de ese modo, su causa p~sa a ser también nuestra causa, su slerecho nuestro derecho. El se declara favorable a nosotros. El está con nosotros. Nosotros tenemos la promesa de nuestra salvación en su reino. Nosotros somos ya de Dios en la esperanza. Precisamente en la negación del sujeto humano viejo y conocido se produce, pues, la fundamentación del nuevo sujeto; en la invisible persona de Dios se constituye la personalidad del hombre. «Tenemos paz con Dios». El hombre que conocemos, es decir, el hombre de la injusticia, en paz con el Dios al que no conocemos: ésa es la luz inaudita en la que entramos por medio de la fe. Paz con Dios significa hacer la paz entre el hombre y Dios mediante un cambio de la actitud humana originado por Dios, estableciendo la relación normal de la criatura con el Creador, fundando el amor a Dios que tiene su comienzo en el temor del Señor, pero que es el único amor posible y verdadero que el hombre puede tener respecto de Dios (5,5). Si no somos justos ante Dios por medio de la fe, nos encontramos en estado de guerra con él: nuestro amor a él es entonces aquella intimidad con Dios que desconoce las distancias y que carece del temor de Dios, aquella intimidad con Dios que, por su esencia, vale del no dios, del dios de este mundo (1,22s), aquella intimidad con la que nosotros nos colocamos, en realidad, bajo la ira de Dios, nos contamos entre los enemigos de Dios (5,10). «Paz con Dios es lo opuesto a toda extasiada seguridad de la carne» (Calvino). Paz con Dios es el orden objetivo de la relación del hombre (¡ como hombre l) con Dios (¡ como Dios!). Por consiguiente, paz con Dios es más que «un sentimiento de dicha y de gozo» (Kühl).

 

Tales sentimientos pueden acompañar o no a este pacto de paz. En cualquier caso, no son un elemento constitutivo de esa paz. Se constituye ese pacto de paz mediante la liberación de la verdad mantenida en prisión (1,18), mediante la revelación de la justicia de Dios (3,21), por medio de la fe. Pero paz con Dios es menos que «vida en la realidad de Dios» (Kutter). No se produce una fusión entre Dios y hombre, no se elimina la línea de la muerte, no se da un proléptico apoderarse de la plenitud de Dios, de la salvación y de la redención final. Persiste con toda su virulencia la lucha entre el espíritu y la carne, entre la carne y el espíritu. El hombre sigue siendo hombre y Dios no deja de ser Dios. Persiste la necesidad de la fe. No es posible quitar a ésta ni la menor brizna de su carácter paradójico. El hombre sigue siendo un ser que aguarda, que no hace más que aguardar, que no ve (8,24). Pero mediante la fe, se convierte en uno que aguarda sólo a Dios, yeso es precisamente su paz con Dios. Por tanto, a medio camino entre el sentimiento humano y la realidad divina se encuentra la significación y fuerza de la paz que tiene el justo por la fe. ¿Dónde, pues? Allí donde la conciencia de lo que Dios es en Cristo se convierte en discernimiento crítico y en unión. «Por medio de nuestro Señor Jesucristo». Debe quedar sentado que esta posesión de la paz se fundamenta y es real sólo en Dios; en ningún otro sitio. Es obra que Dios realiza en nosotros teniendo en cuenta al Cristo crucificado y resucitado. Por tanto, no es el resultado de un proceso psíquico, de una pujanza vitalista del hombre. En la medida en que la fe es también eso, ella no es justicia ante Dios; no puede establecer el orden objetivo entre nosotros y Dios. En virtud de su contenido invisible, ahistórico, en virtud del cambio de vida para la muerte a vida en Cristo, es la fe el poder que nos elimina a nosotros mismos y nos reconcilia con Dios. 

 

 

Pero el grave problema de occidente es que cree que muere a su ego  y nace a Dios pero realmente muere a Dios y nace a su ego desde una fe donde su voluntad  impera sobre toda razón, hoy con Trump en el poder hablando en nombre de dios la cuestión queda clara, el hombre occidental se engaña y engaña es necesaria una razón que el de un sentido positivo a la fe  pero cuando Heidegger hace un estudio sobre Duns Escoto

http://www.modestoberciano.50webs.com/Datos%20Modesto/2.%20Escritos%20Heidegger/pdf/Escritos%20Heidegger/15.%20HEISCOTO.pdf

 

LLega a esta conclusión de que la gramática y la lógica van a parar a la metafísica. Pero no a una metafísica estática, sino a una metafísica de la historia. Las categorías, el significado y el lenguaje se fundan, en definitiva, en una metafísica del espíritu vital e histórico, que es el único espíritu vital humano, sujeto de las categorías y del significado. 

 

Es decir que de Scoto Heidegger pasa indefectiblemente a Hegel y es que la razón dialéctica esta mediada por la voluntad     

¿Pero acaso Hegel no nos llevara aun positividad liberal de derechos?

Si pero esa positividad liberal será criticada por Marx y en Nietzsche, en Freud volveremos a la voluntad pero ahora desprovista de la fe que la haga morir a sus deseo y renacer a la voluntad divina verdadera voluntad de poder y de ser.

Nuestra propuesta es clara devolver a la voluntad al camino de la fe y devolver a la fe al camino de la razón, siendo la razón la mediadora de la fe y la fe la mediadora de la razón.

 

Y es que el ser no es otro que el ser de Dios principio de síntesis racional en él estasis que está  presente desde Parménides a Aristóteles  y en el no ser   es el no ser de Dios como lo entiende el maestro Eckhart y lo desarrolla mucho mejor la escuela de Kioto así Dios nos crea desde su nada absoluta  donándonos su ser y si es así ¿Por qué nuestra esencia no coincide con nuestra existencia? O pensado sistemáticamente porque nuestras súper estructuras no coinciden con nuestras infraestructuras, pues por el pecado que no es otra cosa que la falta de fe, esa fe que te lleva al abismo ontológico hasta la muerte para resucitar, ahí  solo ahí conocemos a Dios y en Dios nos llegamos a  conocer a nosotros mismos y es que la fe impulsa a la razón ¿Pero adonde la impulsa?  Ala síntesis de amor

1(ser como síntesis de razón)→salto de fe→0 nada absoluta →10 Síntesis de amor.

¿Pero es el amor algo positivo?

No el amor está más alla de toda positividad y negatividad  ya si como hay una síntesis hay una asintesis   

 

Asintesis del amor 10←1 ser síntesis de la razón positividad ←0 Nada negatividad pura

 

Pero otra ver estamos ante el problema la fe nos lleva a una negatividad pura en la nada siendo nuestro fondo ontológico el fondo de Dios y la razón nos lleva a la síntesis del ser en una positividad absoluta, pero cuando hacemos la síntesis y la asistesis estamos más allá  de toda positividad y negatividad  ¿Y entonces como podemos determinar positivamente a la fe? No podemos más la fe no es negativa es que en su negatividad se hace positiva y la razón en su positividad se hace negativa, así la levedad del ser, no lleva a la gravedad el devenir y la gravedad del devenir   nos lleva a la levedad del ser, surgiendo la comunión entre fe y razón es esa comunión más allá  de toda positividad y de toda negatividad, la que nos da la pauta, logrando el bien común de lo real no por obligación y ola individualidad singular no por egoísmo.

El problema de lo islámico es claro su bien común es obligado, el problema cristiano es claro no mueren a su ego más bien matan a Dios para que su ego sea Dios, por lo mismo solo en una guerra de imaginarios , en una metafísica de la violencia en una alteración y contra alteración de sistemas en una biodramaturgia    se podrá saber quién es quién, aquellos que separen la razón de la fe   ya sabemos a qué  caminos nos llevan, a una fe del ego como en todo occidente y a una razón instrumental que no alcanza el estasis contemplativo, es la razón la que exige la muerte del ego, esa razón substancial y es la fe la que exige la resurrección de la razón esa razón en comunión de amor que se encuentra a sí misma en los otros.

He aquí la semilla santa plantada en sus corazones.