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martes, 11 de marzo de 2025

Ecuaciones complementarias

 

                           Ecuaciones complementarias  

 

                                            1=≠0 

 

¡Oh tú a quien se invoca

 

bajo nombres tan diversos!

 

¿Cómo podré llamarte?

 

¡Oh tú que eres el único

 

a quien no puede llamarse! (Proclo)

 

 

Juntáis quien no tiene que ser Con el Ser que no se acaba Sin acabar acabáis, Sin tener que amar amáis Engrandecéis vuestra nada. (Santa Teresa)

 

 

«Rechaza el pensamiento y la experiencia de todas las cosas creadas, y de un modo especial aprende a olvidarte de ti mismo, ya que todos tus conocimientos y experiencias dependen del conocimiento y sentimiento que tengas de ti mismo. Todo lo demás se olvida fácilmente en comparación con lo que cuesta olvidarse de uno mismo. Comprueba si la experiencia no me da la razón. Mucho después de haberte olvidado con éxito de las criaturas y de sus obras, te darás cuenta de que sigue permaneciendo entre tú y Dios un conocimiento sutil de tu propio ser. Créeme, no serás perfecto en el amor hasta que no logres destruir también eso». (Hugo-M. Enomiya-Lasalle) 

 

 

«De lo irreal, condúceme a lo real; de la obscuridad, a la luz; de la muerte, a la inmortalidad» 

 

 

«Tras la iniciación, Tota Puri, el hombre desnudo, me instruyó en los principios del monismo absoluto (advaita vedánta) y me pidió que retrajese mi espíritu de todo objeto mundanal y lo sumergiese en el Atman [el «Yo» transcendental, la mismidad universal, lo absoluto e incondicionado, la única realidad]. Pero, a pesar de todos mis esfuerzos no conseguía pasar al más allá de los nombres y de las formas y llegar al Incondicionado... «Cogiendo del suelo un pedazo de vidrio, Tota Puri apoyó la punta entre mis cejas y me dijo: `Concéntrate en este punto'. Me senté poseído de una voluntad firme y reemprendí la meditación... Ya no hubo barrera para mi espíritu: se elevó inmediatamente al más allá y se perdió en el enajenamiento (samádhi). «Permanecí seis meses en ese estado del que los hombres ordinariamente no vuelven, porque, después de veintiún días, el cuerpo se desprende y cae como una hoja muerta. Los días y las noches se sucedían sin que yo recobrara la consciencia. Las moscas se introducían por mi boca y mis narices como en las de un cadáver sin producir reacción alguna. Mis cabellos estaban enmarañados y llenos de polvo. Mi cuerpo no hubiera podido vivir en ese estado a no ser por un sádhu portador de un báculo. Pronto se dio cuenta de lo que me sucedía y venía a mí de vez en cuando. Me traía alimento y para hacerme tragar algunos bocados, me golpeaba vigorosamente. Cuando mostraba yo alguna señal de retorno a la consciencia relativa, colocaba alimento en mi boca y así llegaba a tragar algún bocado. Pasé seis meses en ese estado. Después oí la voz de la Madre [la diosa Káli, en cuyo templo servía Ramakrishna]: `Quédate en el plano de la consciencia relativa para instruir a la humanidad'. Entonces comencé a sufrir violentas hemorragias intestinales y la consciencia del cuerpo me volvió progresivamente...».   

 

¿Qué había sucedido mientras Ramakrishna se encontraba sumido en ese abismamiento vedántico? Lo podemos colegir por unas palabras suyas: «Es fácil decir que el mundo es una ilusión, ¿pero sabéis lo que eso realmente significa? Es como cuando se quema algo de alcanfor, que no deja residuo alguno. No es como la combustión de la madera en la que, al menos quedan cenizas. Cuando la discriminación cesa y se alcanza el samádhi más alto, no existe ya ninguna consciencia del «yo», del «Tú» ni del universo». Se encontraba inmerso en el Brahman e identificado con él, en la consciencia pura desprovista del dualismo sujeto-objeto. ¿Pero qué valor puede tener una experiencia mística carente de experiencia, en la que nada se siente y nada se ve?   Aún no está completa  hay que complementarla.

 

Partamos del principio el ser y el no ser son lo mismo al ser diferentes y opuestos

 

                                           1→0→1→  = ≠←0←1←0  

 

                           Simplificado el ser  es 1 y simplificado el no ser es 0 

                        

                                          1 = ≠0 

Así tenemos el principio de todo el esqueleto ontológico base de nuestras ecuaciones complementarias.  

 

Sabiendo que el ser es  transferencia del ser al no ser para ser: Misterio pascual

1→0→10   

Y sabiendo que el no ser es retransferencia del no ser al  ser para no ser: Misterio Dharmico

10←1←0    

 

Llegamos a la conclusión que son complementarios porque cumplen las siguientes propiedades:

 

  A La de inversión y conversión

 

 Si el ser se invierte tenemos en el no ser  1↓=0 

Y si el no ser se convierte tenemos el ser  0↑=1 

 

B     La de contra transferencia u 0posición

 

El ser se opone al no ser y el no ser al ser

 

1→←0    

 

C La de sintransferencia

 

El ser y el no ser entran en comunión transferencial y retransferencial

 

1←→0 

 

Esto quiere decir que el no ser pude conducir toda la transferencia del ser

1→0→1→0→1→0 

Y que el ser puede conducir toda la retransferencia del no ser  

                        1←0←1←0←1←0

 

Entrando así en una comunión sintransferencial

 

     1←0←1←→0→1→0 

 

D Y por último pero no menos importante la propiedad de doble  mediación

El ser media el no ser 0← (1)←0

Y él no ser media el ser  1→(0)→1

 

Si los desimplificamos se vería así: (ponemos el paréntesis solo para resaltar la mediación)

1→(0→1→0)→1 

 0←(1←0←1)←0 

Así podemos decir que el ser esta dentro del no ser y que el no ser esta dentro del nos ser siendo complementario

E La quinta propiedad no es una propiedad sino un conocimiento de la ciencia del logos:

Si el ser y no ser son complementarios todo realmente es complementario pero solo se descubre su complementariedad en su base ontológica, metafísica.

 

Es decir que hay que llevar toda a su raíz y a su culmine para  descubrir su complementariedad.

Esto se hace por medio de la dialéctica en una negación de la negación donde la inferencia nos va dando nuevos conceptos hasta llegar a lo absoluto.

O por medio de la afirmación de la afirmación donde se vuelve a una asíntesis a un absurdo en nuestro interior siendo este un proceso adialéctico.

 

La tercera manera es agudizar las contradicciones más allá  de la contradicción, logrando la comunión sintransferencial.

 

1→0→1→←0←1←0  

 

1←0←1←→0→1→0 

Más si no se supera la contradicción se produce la herida.

F la impropiedad de la herida

1→0 0→1→←0←1→←1←0

 

Las heridas pueden ser también complementarias parcialmente

 

 

1←0 0←1←=/≠0→1→←1→0

Y es que realmente no logran una comunión sintransferencial

 

G Pero debemos recordar que toda herida en la mediación  preconsciente o en el consciente se puede curar respirando transferencial y retransferencialmente solo la herida del inconsciente no se puede curar, aunque el pecado original la primera seducción-violación es una herida en el inconsciente pero que se proyecta en el preconsciente siendo posible su curación por el misterio pascual en Jesucristo nuestro señor y salvador.  

 

   1→0 0→1→←0←1→←1←0 

 

     1→0→1→0→1→0→1→0→1→0

      1←0←1←0←1←0←1←0←1←0 

01←0←1←→0→1→10  

 

Así tenemos las 4 propiedades de las ecuaciones complementarias y los 4 conocimientos:

1 Inversión conversión conmutables conversión inversión

2  Contra transferencia u oposición

3  Flujo transferencial retransferencial o comunión sintransferencial  

4 Doble mediación, uno dentro del otro

Conocimientos de la ciencia del logos:

5  Todo es complementario pero hay que descubrirlo de tres maneras:

Dialéctica negación de la negación  

 Adialéctica afirmación de la afirmación

Agudización de las contradicciones más allá de la contradicción.

6 si no se supera la contradicción o la contrariedad en si la contra transferencia se produce la herida, las heridas son complementarias parcialmente.

7  Toda herida del preconsciente mediación o del consciente termino final exterior es curable por medio de la propia transferencia y retransferencia logrando la comunión sintransferencial esto es el respirar ontológico espiritual voluntario pero las heridas del inconsciente no son curables.

 

 

 

Así las ecuaciones complementarias son ecuaciones cualitativas donde se trata de descubrir si las diferentes variables son complementarias o no.

Así por ejemplo:

 

Así el misterio pascual que nos revela al Padre1 → al Hijo →y al Espíritu Santo 10

Es complementario con el misterio dharmico que nos devela  a

                                   Bhrama 10←Vishnu 1 ←Shiva 0

Son complementarios, esto quiere decir que son la misma sustancia solo que invertida.

 

  Lo podemos afirmar porque se cumplen las propiedades:

1 El misterio pascual se invierte y tenemos el misterio Dharmico el misterio pascual se convierte y tenemos el misterio pascual.

2  Son opuestos hay conflicto.

3   Pero pueden superar el conflicto logrando la comunión sintransferencial

4 Uno Está dentro del  otro mediando.

 5 Al estar en una ontología desnuda se ve la complementariedad. (Esto no es tan fácil en otros casos)

6  Son estos misterios los que nos permiten ver la herida ya vimos el ejemplo de la experiencia mística dharmica ahora veamos el ejemplo del misterio pascual:

«.La voluntad es ..la que mantiene la tela, mas las otras dos potencias presto tornan a importunar. Como la voluntad está queda, tórnalas a suspender y están otro poco y tornan a vivir. En esto se puede pasar algunas horas de oración y se pasan; porque, comenzadas las dos potencias a emborrachar y gustar de aquel vino divino, con facilidad se tornan a perder de sí para estar muy más ganadas y acompañan a la voluntad y se gozan todas tres. Mas este estar perdidas de el todo y sin ninguna imaginación en nada -que a mi entender también se pierde del todo- digo que es breve espacio, aunque no tan del todo tornan en sí que no puedan estar algunas horas como desatinadas tornando de poco a poco a recogerlas Dios consigo. «Ahora vengamos a lo interior de lo que el alma aquí siente. Dígalo quien lo sabe, que no se puede entender, cuánto más decir. Estava yo pensando cuando quise escrivir esto (acabando de comulgar y de estar en esta misma oración que escrivo), qué hacía el alma en aquel tiempo; díjome el Señor estas palabras: `Deshácese toda, hija, para ponerse más en Mí; ya no es ella la que vive, sino Yo; como no puede comprender lo que entiende, es no entender entendiendo'. «Quien lo huviere probado entenderá algo de esto, porque no se puede decir más claro por ser tan escuro lo que allí pasa. Sólo podré decir que se representa estar junto con Dios y queda una certidumbre que en ninguna manera se puede dejar de creer. Aquí faltan todas las potencias y se suspenden de manera que en ninguna manera, como he dicho, se entiende que obran... La voluntad debe estar bien ocupada en amar, mas no entiende cómo ama. El entendimiento, si entiende, no se entiende cómo entiende; al menos no puede comprender nada de lo que entiende; a mí no me parece que entiende, porque -como digo- no se entiende; yo no acabo de entender esto» (V 18. 10-14). Resulta encantador y aun sublime todo eso de «no entender entendiendo», resumido magistralmente en las últimas palabras: «el entendimiento, si entiende, no se entiende cómo entiende, al menos no puede comprender nada de lo que entiende; a mí no me parece que entiende, porque - como digo- no se entiende», para acabar todo ese enmarañamiento verbal con el «yo no acabo de entender esto». Aquí sí que estamos ante una experiencia superadora de la razón discursiva y por lo tanto inefable. De ahí que la Santa se vea precisada a apelar a quien la haya vivido. Los demás no podemos ni barruntar lo que en ella pasa. Lo importante es que «la voluntad debe estar bien ocupada en amar; aunque no entiende cómo ama». Toda oración, más aún en sus formas más altas, es para Santa Teresa un ejercicio de amor. La narración precedente corresponde a la oración de unión, de la que hay que distinguir el arrobamiento . La primera es como el agua que llueve abundante del cielo y riega el huerto sin esfuerzo por parte del hortelano. En el segundo, «coge el Señor al alma... a manera que las nubes cogen los vapores de la tierra, y levántala toda ella... y sube la nube al cielo y llévala consigo y comiénzala a mostrar cosas de el reino que le tiene aparejado». Veamos cómo describe la Santa el arrobamiento. «En estos arrobamientos parece no anima el alma en el cuerpo y ansí se siente muy sentido faltar de él el calor natural; vase enfriando, aunque con grandísima suavidad y deleite. Aquí no hay remedio de resistir, que en la unión, como estamos en nuestra tierra, remedio hay; acá las más veces ningún remedio hay, sino que muchas sin prevenir el pensamiento ni ayuda ninguna, viene un ímpetu tan acelerado y fuerte que veis y sentís levantarse esta nube u esta águila caudalosa y cogeros con sus alas... Es ansí que me parecía, cuando quería resistir, que desde debajo de los pies me levantavan fuerzas tan grandes que no sé cómo lo comparar, que era con mucho más ímpetu que estotras cosas de espíritu y ansí quedaba hecha pedazos; porque es pelea grande y, en fin aprovecha poco cuando el Señor quiere, que no hay poder contra su poder».

 

Los efectos sentidos en el arrobamiento son varios. En primer lugar, un profundo sentimiento de humildad ante la majestad del Señor, con un gran temor de Dios y de ofenderle «que espeluza los cabellos», pero «envuelto en grandísimo amor». En segundo lugar, se siente un «desasimiento estraño» aun en el mismo cuerpo «y hócese una estrañeza nueva para con las cosas de la tierra, que es muy más penosa la vida». Sigue a ese desasimiento un gran «deseo y estremo de soledad en que se ve con una pena tan delgada y penetrativa... que al pie de la letra se puede entonces decir...: Insomne estoy y gimo cual solitario pájaro en tejado'... . Ansí parece que el alma está no en sí, sino en el tejado o techo de sí mesma y de todo lo criado, porque aun encima de lo muy superior del alma me parece que está». El alma siente agudamente la ausencia del Amado de tan gran manera que «parecen unos tránsitos de muerte, salvo que tray consigo un tan gran contento este padecer que no sé yo a qué lo comparar», es como «un recio martirio sabroso». Todo eso va acompañado de grandes ansias de morir para ver a Dios. «Después que torna a sí, si ha sido grande el arrobamiento, acaece andar un día o dos y aun tres, tan absortas las potencias u como embobecida que no parece anda en sí».

 

Así tenemos que el misterio pascual puede transferir amando hacia afuera

 

1→0→10  uniéndose a Dios en el amor al prójimo   

 

Y retransferir en un arrobamiento

01 ←0←10

Siendo la unión tanto exterior como interior.

Pero el misterio Dharmico también puede retransferir  

 

10←1←0  

Como en el ejemplo que leímos

Y transferir como en la experiencia de cualquier relación sexual

1→0→10 

Que se trabaja en el tantra  yoga

O aun en cualquier experiencia de trabajo o labor donde se alcanza gran placer como en el trabajo artístico creativo.

Y de hecho uniendo la transferencia de lo pascual y lo dhramico

 

1→0→1→0→1→0 

Tenemos una fe activa que se expresa físicamente o materialmente como en una obra de arte

 

Y si hacemos la retransferencia

 

1←0←1←0←1←0 

 

Tenemos algo muy parecido a una experiencia mística neoplatónica:

Plotino tiene una visión cosmológica y ontológica del mundo muy especial, indudablemente influida por la teoría platónica de los dos mundos. Elabora toda una cosmología - que de hecho es una ontología - en la que explica que la realidad está presidida por el Uno. El Uno de Plotino es algo indefinible, algo más allá de toda realidad, más allá de toda definición, más allá de todo nombre, más allá de toda delimitación. Él es la fuente del espíritu y la fuente de la vida, y la fuente de la realidad, y la fuente de todo lo que es, pero El mismo no es, porque si fuera sería algo entre las cosas que son y el Uno no es en la medida en que no es como las cosas que son. “[El Uno] es más que un ser, más que esencia, más que existencia, más que Dios... El Uno no puede ser ninguna cosa existente, sino que es primero que todas las cosas existentes... Es tal que nada puede predicarse de Él, ni el ser, ni la esencia, ni la vida” '

 

https://archive.org/details/toscano-ancochea.-misticos-neoplatonicos-neoplatonicos-misticos-ocr-1998/page/22/mode/1up  

 

El Uno es, y, por debajo de Él, el Nous forma, ordena, crea, realiza la inteligencia; luego viene el alma, pero el Alma del mundo, el Alma del universo, lo que sustenta la vida. La vida no es algo que yo tengo para mí solo, la vida es algo que transcurre por toda la realidad, que fecunda la realidad, toda ella entera, desde los astros al último gusano del camino, a la tierra, todo está vivo. Decían: todo está lleno de dioses. Todo está lleno de espíritu, todo está lleno de vida, todo vibra, todo es, y todo es en la medida en que participa del Uno. 

 

 

 

Desde el Uno, al Nous y al Alma del mundo hay graduación, sin que haya mengua del ser del Uno, que permanece “siempre” como una realidad indivisible, se trata de un proceso de emanación. Emana, surge de la plenitud del Uno. El Uno no tiene más remedio que expandirse porque el Bien es difusivo por esencia, el Bien es la totalidad y como que no le queda más remedio que hacerse otro. Diríamos que dentro del Uno existe una pasión por el ser, que hay un Eros, ese es el Eros de Platón. El Eros platónico es la necesidad, la tendencia, el ansia de poseer aquello que de eterno hay en las cosas, y eso late en toda la realidad, late continuamente, late como un recuerdo de lo que uno €s, la realidad vibra porque ya es eterna, aunque ella no lo sepa. Por eso, la filosofía libera de la ignorancia para alcanzar la luz que es el contacto con la realidad. Tenemos pues: el Uno, el Nous, el Alma, y luego el alma individual. Todos y cada uno de nosotros constituimos con ese alma una totalidad viva, el fundamento de la realidad. Gozamos de lo que los griegos llamaban “simpateia”, sim es “con”, patos es “movimiento del alma”, impulso fundamental de la vida, sim-patos significa aquellos que coinciden en el mismo patos, eso es ser simpático, estar en simpatía con la realidad. Lo simpático es lo contrario de lo antipático, el anti implica separación, dualidad, ruptura, lo que no es igual. El sim-patos significa la identidad. Las almas, dice Plotino, gozan de la simpatía con el universo, el sim-patos de la realidad. Aquello que comunica la realidad.

 

Plotino nos describe, por lo tanto, un universo de emanación, de vida, de plenitud, de totalidad que va degradándose del Uno (de aquella realidad última, indefinible, ajena incluso a la aprehensión, casi incapaz de ser tenida, incluso anterior a la propia idea de lo que nosotros llamamos Dios), a la materia. Porque aquello que nosotros hemos llamado Dios, es ya una explicitación del Uno, ya es una manifestación primera de la realidad, el Uno subyace ocultamente, aquello que sustenta lo divino, eso, es el Uno. Pero la realidad no se acaba en esa realidad emanada del Uno. El Nous, el Alma, el alma, el mundo de la materia, todo, de una manera como magnética vuelve automáticamente al Uno. El proceso es doble: por una parte lo que se llama la procesión del Uno, el prodos, la degradación del ser, aquello que emana por la propia esencia del Uno, por la propia plenitud del ser y, por otra, la necesaria conversión hacia el Uno (convertirse es dar la vuelta, lo que se llama la “epistrofé”). Una vez que se ha llegado a la materia, se retoma el camino del ascenso, vuelve al origen y vuelve al origen porque el origen la atrae, le llama, es el Eros, es la atracción última, es la pasión última de vivir. Todo vive por ese Eros. Vivimos única y exclusivamente para dar salida a esa necesidad de reencuentro con el Uno.   

 

Es en ese reencuentro que nos curamos, más si lo uno no se complementa con la nada no hay reamente comunión la cual es un chaupi quipu atar y un Koshi kene desatar

 

HAYLLI

Tú, el hombre del grito, la cañahueca del chillido, el faramalla de la mesnada... Quieres bostezar en latín mientras te hace viento la pereza. ¿Qué buscas zurziendo con tedio el tedio de tus polikos ? Alzate en fuerza y alegría; que si tu dolor horrendo fue, tu júbilo debe ser luminoso. Aprende al padre en tí, padre; del cojo pata de palo, aprende en el palo de la pata y en el ojo. No al razonar te vuelvas Teofrasto, ni en santo te atente Timoteo Prefiere el pájaro del pajarero, y de los varones que verbo fueron La reja del arado y la semilla Ca que por ser, y por saberse sembradores de la simiente, nunca diarreas del cuesco lamentaron. ¡Tienes que parirnos y parirte!  

 

En nuestra reflexión hemos encontrado que:

 

   Occidente =≠Oriente complementarios

Complejo de Edipo =≠Complejo de Electra  complementarios  

Condensación =≠ Desplazamiento Complementarios

 

8- Recordemos si no hay uno no puede existir el otro

   Y si se pone uno en contra posición el otro se forman sistemas

 9 Y si se logra la sintraferencia se abre el campo ontológico  

 

Así podemos decir que el capitalismo que condensa el capital es complementario al comunismo que lo desplaza socializándolo

     Capitalismo=≠Comunismo  Complementarios.

 

10 Por ultimo para hacer un biotejido tenemos que lograr la complementariedad ene l inconsciente con sus misterios recreados en mitos y ritos, en el preconsciente por medio del arte  donde se complementa la expresión y la impresión, en el consciente donde se complementan la libertad positiva y la negativa, en lo socio cultural donde se alteran los sistemas hasta complementar la estructura con la anti estructura revelando la meta estructura que es una súper conciencia, un espíritu integrado un resein, una comunión de amor.

 

 

11-La ciencia del logos tiene esto por único conocimiento la complementariedad entre la comprensión esotérica y exotérica pero el juicio de que algo es complementario está  abierto y se tiene que llevar acabo concretamente para eso está el arte del biotejido.

 

12- Así la complementariedad es llevar las matemáticas a la poesía, y la poesía a la mística. 

 

«No digas nada, nada, nada. No digas nada si no es el nombre de Krishna. Dejando a un lado la caña de azúcar, no exprimas el amargo fruto del limbri. Desairando el resplandor de la luna y el sol, no te enamores de una candela Desdeñando los diamantes, las perlas y las joyas, no compares el peltre con la piedra preciosa. Krishna es el amante de Mirambai; he trocado mi vida por la suya». 

 

 

«Tu gloria consiste, oh Dios, en ser llamado salvador de los pecadores. Oh, que esta gloria te dure. Los santos te llaman Señor de los desesperados. El oírlo me ha inspirado confianza». 

 

 

Bendita seas, tú, en la hostia del vientre, Pacha mama;  porque eres madre de toda hostia.

 

 


 

 

1 comentario:

Christian Franco dijo...


Sócrates de la plaza Sanmartin · Creador
Más cuando Aristóteles quiere demostrar el principio de no contradicción dice que no se puede demostrar afirmativamente pero tampoco se puede negar
De hecho si lo niegas de alguna manera lo estarías afirmando pues el principio de que el ser y el no ser son lo mismo y a la vez diferentes tampoco se puede negar o afirmar es que es un principio base de toda negación y afirmación